El clima en Neuquén

icon
15° Temp
88% Hum
La Mañana

En el petróleo, jugar es morir

Alfredo Vigil

La protesta de la familia Campo Maripe, que acaba de bloquear algunos de los accesos al yacimiento Loma Campana, que opera YPF en sociedad con Chevron, y de tomar dos equipos de perforación, representó un hecho de una gravedad extrema dentro de la industria petrolera. Los manifestantes treparon a equipos de la empresa Nabors y mujeres de esa familia se encadenaron a ellos con el fin de que el gobierno provincial los reconozca como mapuche o pueblo originario. Eso puso en peligro la vida de los manifestantes y de los operarios presentes, y en riesgo la misma operación de los equipos en los pozos.
El acceso a un equipo de perforación, o work-over, demanda estrictas medidas de seguridad, no solo para los escasos visitantes que puedan llegar, sino para los mismos operarios. Una torre difícilmente sea un lugar de paseo o de esparcimiento. La industria hidrocarburífera estableció severas normas de seguridad tras una dura curva de aprendizaje jalonada por innumerables incidentes. Ante este tipo de reclamos, el tiempo juega en contra y el Estado debe, urgente, tomar cartas en el asunto para evitar la pérdida de vidas humanas. La presencia en un pozo de gente no capacitada es jugar con la muerte. Y esto lo deben entender de una buena vez las autoridades, que deben poner coto a este tipo de reclamos en los que todo vale. El Poder Judicial parece no haber aprendido lo suficiente: hace tiempo, una oficial de la Justicia fue desfigurada cuando se hizo presente ante una protesta de mapuches. La mayor actividad económica de la provincia necesita certezas. Y la seguridad de no ser atacados, invadidos, agredidos o boicoteados es una de ellas. No hay dos naciones. Hay una Argentina y todos somos esclavos de la ley.

Lo más leído

Dejá tu comentario